Fue notorio cuando en 2015 el cuatro veces Campeón del Mundo de la Formula 1, Sebastian Vettel, abandonó la escudería Red Bull para unirse a Ferrari. Lo hizo sin que una sola lágrima cayera por su rostro tras firmar un contrato por tres años y $110 millones de dólares, más bonos. No, me equivoco. Habrá llorado de felicidad. ¿Cuánto es en pesos? En español: una barbaridad. Si tomo el caso de otro piloto, antes de iniciar la temporada 2015, Lewis Hamilton firmó una extensión de contrato de 3 años con Mercedes. Al salario anual “básico” de $31 millones de dólares por temporada se le sumaba un aumento significativo también en bonos. De hecho, tras hacerse la última temporada de la F1 con el título, su salario anual se incrementó a $40 millones de dólares. Otro caso: el español Fernando Alonso firmó un contrato de 2 años con McLaren-Honda con la opción de ampliarlo a tres y un salario que ronda los $40 millones por año. Por su parte Sergio “El Checo” Pérez percibe un sueldo menor, hasta pequeño comparado con estos grandes del club de Tobi automotriz, de $3.2 millones de dólares a bordo de su monoplaza Force India. Aún así, ya quisiéramos.
Rápidos y furiosos
Es sabido que los pilotos son de los deportistas más ricos y famosos del orbe. Se codean con la
socialité y élite que maneja Lamborghinis y no transforma el agua en vino, pero sí en champaña Dom Pérignon. Se trata de un jet-set más picudo que el que acostumbran los futbolistas o tenistas top.
Cuando las figuras de la F1 conviven con “pueblerinos”, con los de Mónaco, en efecto, ésos que pasan sus días navegando en yates con 150 pies de eslora… Mejor dejaré de lado la tremenda envidia que los pilotos me provocan porque en algo nos ayudan: a pensar que nuestros vehículos o carcachas son mucho más que una característica inmutable de la vida diaria y nada más, sino que la ingeniería y velocidad aplicada puede traducirse en glamour, fama y riqueza.
Si aún no se deciden a odiarlos, deténganse en el
sex appeal de los pilotos. Y aunque las discusiones y polémicas que debaten el rol de las mujeres en la F1, como en otros ámbitos, son motivo de análisis (más porque no hace mucho Bernie Ecclestone, expresidente y director ejecutivo de la F1, expresó la necesidad de iniciar un campeonato exclusivamente femenino), los pilotos sin lugar a dudas tienen la máquina a punto si se trata de lograr la bandera a cuadros con todo tipo de mujeres.
Los pilotos y sus amores
- No hace mucho tiempo
Lewis Hamilton oficializó una sonadísima separación sentimental con la estrella pop Nicole Scherzinger del grupo The Pussycat Dolls. Todo lo que empieza, termina y luego de siete años de relación –con tres separaciones previas–, su relación no dio más. Se rumora que tras la ruptura, Hamilton se lió con la joven modelo Kendall Jenner (de la dinastía de encueratrices Kardashian) y con Gigi Hadid, ahora novia de Joe Jonas (de los Jonas Brothers). Pero no, tache a Codependientes Anónimos luego de que Hamilton nuevamente se involucró con Scherzinger
- El piloto alemán
Nico Rosberg, de Mercedes asegura que siempre busca el consuelo de sus seres queridos cuando las cosas no salen bien en las pistas. Seguramente por ello eligió a Vivian Sibold como pareja, hija de un reconocido empresario alemán de la industria farmacéutica.
- Por su parte
Sebastian Vettel mantiene una sólida relación con la modista Hanna Prater. El piloto alemán ha de ser como Kevin Arnold de
Los Años Maravillosos, porque sale con ella desde la preparatoria. En 2014 dieron a luz a la bonita (creo) niña Emily.
- El piloto de carreras finlandés
Valtteri Bottas corteja a la alta rubia Emilia Pikkarainen de 22 años de edad. Su compatriota es una nadadora profesional.
- Otro finlandés en el top 5 universal (no de los últimos años) de la clasificación de la F1 es
Kimi Räikkönen. El veterano de las pistas ha confesado su admiración por el talentoso, salvaje y mujeriegazo James Hunt. Tras saberlo su afición por el extinto piloto, no parece raro que Kimi haya logrado fama por su comportamiento frío y áspero con los medios, compañeros de pistas y por su política de ofrecer cero disculpas. Acumula anécdotas y se la pasa bien sin mirar a quien. Atrás quedó su divorcio en 2013 de Jenni Dahlman, ex miss Finlandia y ahora le dedica sus “arranques” a Minttu Virtanen, una azafata de líneas aéreas y modelo de acondicionamiento físico y ropa interior. El 28 de enero de 2015, Virtanen dio a luz al primer hijo de la pareja, un niño, Robin Räikkönen.
- Por su parte
, Fernando Alonso ha presumido muy buenos gustos en sus relaciones sentimentales. Contrajo matrimonio con Raquel Del Rosario, vocalista del grupo El Sueño de Morfeo, y tras su separación, inició una relación con la modelo rusa Dasha Kapustina. Terminaron a finales de 2014 y últimamente ha mantenido una relación sentimental con la escultural periodista Lara Álvarez.
- Vaya si el australiano
Daniel Ricciardo del equipo Red Bull no pierde el tiempo, ya que sale con la guapísima Jemma Boskovich.
- Dicen que la “novia F1" más perseguida por las cámaras es la japonesa Jessica Michibata, esposa del británico
Jenson Button.
- El tapatío Sergio
“El Checo” Pérez ha hecho historia en la Formula 1 y también porque su novias es de las más guapas, Andrea Campillo.
Por Ricardo Lestrade